Los sistemas ADAS (Sistemas Avanzados de Asistencia a la Conducción) suponen enorme avance en seguridad, cuya implantación progresiva en el parque de automóviles está reduciendo el número de víctimas y de heridos; y también los costes económicos asociados y las reclamaciones a los seguros por siniestros.

El 31% de los automóviles vendidos en España en 2017 equipaba sistemas de frenada automática de emergencia; y el 30%, ayudas al mantenimiento del carril. Pero muchos de los conductores de esos vehículos desconoce las limitaciones estos, y otros sistemas ADAS; y su funcionamiento exacto. Como en la mayoría de los avances tecnológicos, su comprensión y el uso adecuado por parte de las personas son cruciales para obtener todos sus beneficios. Y es muy importante comprender que estas tecnologías están diseñadas para hacer que la conducción sea más segura y ayudar al conductor, no para reemplazarle. Los sistemas ADAS son el inicio del camino hacia la conducción autónoma, no el final del recorrido.

Cinco consejos Carglass® para aprovechar al máximo los sistemas ADAS

La responsabilidad de conocer qué sistemas equipa un coche y cómo funcionan es compartida. El fabricante tiene la obligación ética de informar a su cliente; pero el propietario también la responsabilidad moral de preocuparse por su seguridad y la del resto de los usuarios de las vías. Siguiendo estos simples cinco consejos, se podrían evitar muchas situaciones de riesgo y aprovechar al máximo la eficacia de los sistemas ADAS.

  1. Antes de adquirir un automóvil, compruebe el equipamiento de seguridad que incorpora de serie y el que ofrece opcionalmente. Por ejemplo, el sistema de detección de ángulo muerto suele ser opcional en modelos que sí incorporan una batería de sistemas ADAS de serie. Reflexione sobre la importancia de invertir dinero en esos equipamientos frente a otros de carácter estético o de confort.
  2. Solicite una prueba de demostración y de conducción del coche que va a adquirir antes de comprarlo, para comprobar el funcionamiento de algunos sistemas ADAS y que no le cojan por sorpresa más adelante.
  3. Reserve unas horas el día de la entrega en el concesionario y pida al personal encargado que le explique el funcionamiento exacto de los todos los sistemas: cómo se activan y desactivan (si es que tienen esa opción), las regulaciones que permiten, sus funciones y limitaciones, las alertas que producen…
  4. Dedíquele un tiempo a leer el manual de propietario del vehículo, por lo menos, en los aspectos que conciernen a la seguridad.
  5. Estos sistemas suponen una valiosa asistencia al conductor, pero no lo reemplazan. No confíe ciegamente en los sistemas de asistencia ADAS, dejándole a la tecnología el control absoluto de su coche. Por ejemplo, realice siempre verificaciones visuales; y no retire los pies de los pedales, aunque su coche mantenga de forma automática la velocidad y la distancia con el automóvil que le precede de forma automática.

No hay que confiar ciegamente en los sistemas ADAS

Un estudio encargado a la Universidad de Iowa por la Fundación AAA para la Seguridad del Tráfico ha demostrado que todavía queda mucho trabajo por hacer para educar a los conductores sobre el uso adecuado de las tecnologías ADAS y sus limitaciones. El estudio se realizó entre conductores que habían adquirido recientemente un vehículo con tecnologías ADAS, y arrojó conclusiones preocupantes.

  • El 80% de los conductores cuyos coches equipan detección de ángulo muerto desconocían sus limitaciones o creían incorrectamente que este sistema podía detectar con precisión a vehículos que pasan a velocidades muy elevadas, o a bicicletas.
  • Casi el 40% de los conductores desconocía la diferencia entre el sistema de advertencia de colisión delantera y el frenado automático de emergencia. Este elevado porcentaje de los encuestados creía, incorrectamente, que el sistema de advertencia de colisión delantera podría aplicar los frenos en caso de emergencia, cuando esa tecnología solo alerta.
  • Un 25% de los conductores reconoce que con la detección de ángulo muerto y la alerta de tráfico cruzado, no realiza verificaciones visuales complementarias, confiando únicamente en el funcionamiento de estos sistemas.
  • Un 25% de los conductores que utiliza sistemas de advertencia de colisión frontal o de cambio de carril involuntario reconoce que se sienten cómodos realizando otras tareas mientras conducen.

Los sistemas ADAS y el parabrisas

Los sistemas ADAS necesitan de “ojos” y sensores que detecten todo lo que sucede alrededor del coche y recojan la información, para luego actuar en consecuencia, proporcionando al conductor y a los ocupantes la mayor seguridad posible. Esos “ojos” y sensores disponen de unas capacidades y limitaciones debido a su tecnología y naturaleza. Solo la combinación de la información aportada por todos ellos -denominada fusión de sensores- por parte del “cerebro” del automóvil, produce un reconocimiento fiable del entorno.

La inmensa mayoría de las cámaras de los sistemas ADAS están montadas en el parabrisas. Cuando se sustituye un parabrisas, hay que desmontar las cámaras del cristal roto y montarlos en el nuevo. Una vez instalados, estos sistemas han de ser recalibrados para asegurar que funcionan con la máxima precisión y proporcionan la información correcta a los sistemas de seguridad.

Carglass® es el único especialista en cristalería del automóvil que dispone de la tecnología para calibrar los sistemas ADAS (Sistemas Avanzados de Asistencia a la Conducción) en el 100% del territorio nacional. El equipo técnico de Carglass® dispone de la formación adecuada para realizar una calibración de tecnología ADAS impecable. Carglass® no solo dispone de los instrumentos y tecnología innovadora para calibrar correctamente, sino que también invierte constantemente en su actualización tecnológica y de servicios.

Para Carglass® la difusión de la importancia del mantenimiento del parabrisas es fundamental, puesto que ejerce una función primordial en la seguridad de las personas. Por ello, somos patronos de FESVIAL y organizamos Jornadas sobre Tecnología y Seguridad Vial.